Alfredo Di Stéfano Laulhé, de 88 años y tres días de edad, falleció
ayer a las 17:15 horas en el Gregorio Marañón. El Presidente de Honor
del Real Madrid estaba rodeado de sus cinco hijos en el momento de la
defunción. El sábado, celebrando su cumpleaños con la familia y amigos,
sufrió una parada cardiorrespiratoria y tuvo que ser reanimado durante
18 minutos. Ingresó en la UCI del Gregorio Marañón y los médicos
consiguieron estabilizarlo pese a tener una cardiopatía severa. Se
mantuvo estable dentro de la gravedad pero ayer, a primera hora de la
tarde, su estado se agravó hasta que llegó el fatal desenlace. La salud
de Di Stéfano había empeorado en los últimos dos meses. Estuvo ingresado
hasta siete veces en el mes de junio y casi no salía a la calle.
En cuanto se produjo el fallecimiento, el mundo entero lloró la
muerte del jugador más grande de la historia del fútbol. Las redes
sociales le convirtieron en trending topic mundial. “Di Stéfano”, “Saeta
Rubia”, “Don Alfredo”, “Eterno Alfredo”, “Descanse en paz”, estaban
entre los vocablos más utilizados en Internet.
Mientras, sus cinco hijos (Silvana, Alfredo, Helena, Sofía e Ignacio)
junto con Manolo Redondo, director general de la Presidencia, decidían
qué hacer en el gran homenaje de cuerpo presente que hoy recibirá La
Saeta en el Bernabéu. El féretro fue trasladado al tanatorio La Paz en
Tres Cantos, donde fue embalsamado y preparado para la jornada de hoy.
En el Bernabéu, a las siete de la tarde, Florentino Pérez, con traje
negro y corbata negra, acompañado por su Junta Directiva, leyó un
mensaje institucional e informó que el Bernabéu se convertirá hoy en la
capilla ardiente: “Este estadio fue su fábrica, su territorio sagrado,
su casa y su vida, y es aquí, por expreso deseo suyo y el de toda su
familia, donde le rendiremos el gran homenaje que merece”.
Al final del acto se proyectó un vídeo emocionante de casi seis
minutos de duración con las mejores imágenes de Di Stéfano y la canción
My way de Frank Sinatra. Vídeo que provocó las lágrimas de Florentino
Pérez, muy afectado ayer por el fallecimiento del presidente de honor.
El entierro será mañana por la tarde en el cementerio de La Almudena
de Madrid. La familia ha pedido que sea en la más estricta intimidad ya
que entienden que la gran despedida será a lo largo de todo el día de
hoy y quieren discreción en el último adiós. Di Stéfano reposará para
siempre junto a su esposa Sara, que falleció el 14 de mayo de 2005, y su
hija Nannette, que murió en diciembre de 2012. Madrid ha sido su casa
desde 1953 y es aquí donde reposará para siempre.
Las imágenes finales del vídeo homenaje que le ha hecho el Real
Madrid y que ha enviado a todos sus socios pertenece al final de la
película La batalla del domingo, de 1963. Es una imagen de Di Stéfano en
el que se imagina cómo será su despedida del Bernabéu. Un guardián del
Bernabéu le dice: “Ya lo tiene usted todo Don Alfredo… hasta el final de
su película. ¿Piensa usted en el otro final?”. Y Alfredo le responde:
“Todas las despedidas son tristes. Algún día hay que irse, y cuesta,
duele, porque aquí está lo mejor de mi vida (mirando las gradas del
Bernabéu y levantando su mano diciendo adiós)”. Se va un genio, queda el
mito. Descanse en paz.
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