El párroco de la remota localidad de Capurganá, en el departamento del Chocó, noroeste de Colombia, Gualberto Oviedo Arrieta, fue asesinado por desconocidos a machete, revelaron hoy las autoridades que hallaron su cadáver.
“Nuestra profunda tristeza al constatar que, precisamente dentro de la Semana por la Paz, ha sido segada la vida de un sacerdote, que se ha entregado al servicio de los más pobres en la región de Urabá”, como párroco de Nuestra Señora del Carmen en Capurganá, señaló este lunes la Conferencia Episcopal en un comunicado.
El religioso, de 31 años, y que pertenecía a la Diócesis de Apartadó, municipio del departamento de Antioquia, llevaba cerca de un año en esa parroquia.
Con el homicidio del Oviedo Arrieta son seis los sacerdotes asesinados en Colombia en lo que va de este 2011, recordó la Conferencia Episcopal en un comunicado de prensa.
“Una cifra altamente preocupante, que manifiesta el estado de violencia y de deterioro moral que vive nuestra sociedad” afirmó Juan Vicente Córdoba, secretario general del Episcopado.
Al parecer, el asesinato del sacerdote se registró en la noche del domingo en la casa asignada por la curia.
El pasado día 1 de septiembre fue también asesinado Reynel Restrepo Idárraga, párroco de la población de Marmato en el departamento de Caldas (noroeste), acribillado cuando viajaba en una motocicleta entre las poblaciones de Belén de Umbría y Guática, en ese territorio.
El 27 de enero pasado fueron hallados en la localidad de Kennedy, en Bogotá, los cuerpos de los sacerdotes Rafael Reátiga Rojas (de la Diócesis de Soacha, y Richard Armando Piffano Laguado, de la Diócesis de Fontibón, ambas en la periferia de la capital colombiana.
El 12 de febrero fue el sacerdote Luis Carlos Orozco Cardona, asesinado en la población de Rionegro en el departamento de Antioquia (noroeste).
Y el 12 de mayo, el sacerdote Gustavo García, capellán de la Universidad Minuto de Dios, fue asesinado en Bogotá por un desconocido por robar su teléfono móvil.
Según la Conferencia Episcopal de Colombia, entre 1984 y septiembre de 2011, en el país han sido asesinados dos Obispos, 79 sacerdotes, ocho religiosas y religiosos, así como tres seminaristas. EFE
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