Un hombre condenado a muerte por el asesinato en 1994 de la empleada de una tienda recibió este jueves la inyección letal en el estado de Alabama (EE UU) y se convirtió en el tercer ejecutado esta semana en el país.
Derrick Mason, de 37 años y raza negra, fue ejecutado a las 18.49 hora local (22.49 GMT) en la prisión de Holman, según confirmaron a la prensa funcionarios del penal.
Sus abogados habían presentado este mismo jueves un recurso de última hora ante la Corte Suprema de EE UU para evitar su muerte que no prosperó.
Mason pidió perdón
a la familia de la víctima antes de recibir la inyección letalMason, condenado a la pena de muerte por el asesinato en marzo de 1994 de Angela Cagle, de 25 años, durante un robo en una tienda de Huntsville (Alabama), pidió perdón a la familia de la víctima antes de recibir la inyección letal.
De acuerdo con documentos judiciales, Mason confesó el crimen después de ser arrestado.
Su ejecución fue la quinta del año en Alabama y la número 36 en todo el país.
Además, fue la tercera en tan solo dos días, en medio de la polémica desatada por la de Troy Davis, ejecutado en la noche del miércoles en Georgia pese a las dudas sobre su culpabilidad y el rechazo suscitado a nivel mundial.
Este miércoles también fue ejecutado, en Texas, Lawrence Russell Brewer, un racista blanco radical condenado a muerte por el asesinato de un hombre negro.
Con estas tres ejecuciones suman 1.270 las realizadas en los 34 estados de EE UU en los que está vigente la pena muerte desde 1976, cuando se restableció el castigo tras una moratoria de 10 años.
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