viernes, 11 de junio de 2010

FRACASO DEL FUNCIONARIADO DE PRISIONES


Lo que prometía ser una jornada muy especial para un grupo de reclusos del centro penitenciario con una visita a la Universidad de Huelva (UHU) fue aprovechada por un preso para escaparse huyendo por el campus del Carmen. El intento de los funcionarios que los acompañaban por darle alcance resultó infructuoso.

El fugado es un joven de 26 años que responde a las iniciales L.C.P., según informó la Policía Nacional, que ya ha montado un dispositivo de busca y captura. Al recluso le constan varios antecedentes policiales y cumplía una condena de tres años y ocho meses por robo con violencia.

La Facultad de Derecho iba a realizar una actividad incluida en la asignatura Practicum, de 5º en la que los reclusos mantendrían un encuentro con los alumnos, al que le seguiría un recorrido por el campus universitario. El grupo estaba integrado por 8 internos y 5 funcionarios y educadores.

Tanto los presos como los funcionarios y educadores llegaban al campus en un autobús. Antes de entrar en la Facultad, los medios de comunicación allí presentes quisieron tomar imágenes del grupo. L.C.P. se negó a ser fotografiado y salió huyendo al grito de "me voy a mi casa". Los funcionarios iniciaron la carrera tras él, pero no consiguieron darle alcance. Según fuentes penitenciarias mencionadas por Efe, el fugado hubiera salido en libertad condicional en marzo de 2011 y le definieron como una persona "de carácter pacífico y tranquilo", por lo que consideran "una locura" su acción ya que "implica quebrantamiento de condena" y, por lo tanto, su no salida de prisión cuando estaba prevista.

Dadas las circunstancias, la actividad en Derecho quedó suspendida. Sin embargo, los internos sí participaron en un programa de Uniradio, la emisora de la UHU, tal y como estaba previsto.

Esta ha sido la quinta ocasión en la que los reclusos del centro penitenciario visitan la Universidad de Huelva. Dentro de la colaboración que ambas instituciones mantienen, los alumnos de Derecho acudieron al centro el otoño pasado y pudieron ver de primera mano, las actividades de formación que allí se realizan. En esta ocasión, los internos devolvían la visita y compartirían sus experiencias dentro de la unidad o módulo de Respeto.

José Alberto F. explicó que "es una unidad terapéutica y educativa que tiene como propósito ayudar a los que tienen problemas de droga". José María M. indicó que "la unidad cuenta con 87 personas que compartimos la misma problemática y se "crea un ambiente de amistad y sinceridad con el que buscamos salir de la subcultura carcelaria y restablecer los vínculos con las familias".

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