Cuando se está de viaje, que te roben la cartera es una de las peores cosas que pueden pasar. No sólo por perder el dinero, sino porque los documentos que van en la cartera son importantes y hay que renovarlos, además de que son necesarios.
La web Tryp Advisor hizo una búsqueda entre sus comentarios, indexando las ciudades donde más se mencionaba la palabra “carterista”. Nuestro país no sale muy bien parado, sino más bien al contrario: somos de largo los más “manguis” de la Unión Europea.
1. Barcelona, España
Los carteristas profesionales, especialmente los de la zona de Las Ramblas, son un continuo quebradero de cabeza para el Ayuntamiento. También para la Oficina de Turismo, que tiene que leer en Internet exageraciones como esta: ”En la capital catalana robar carteras es algo tan popular como el fútbol”.
2. Roma, Italia
Los italianos siempre han tenido fama de supervivientes. En la Ciudad Eterna abundan los macarras, ladronzuelos y buscavidas atentos a cualquier oportunidad que les ofrezca un visitante despistado. Abunda el robo de bolsos por el método del tijeretazo de sus asas.
3. París, Francia
No todo es glamour en la capital francesa. El índice de robos de dispara en el metro, donde la gente va tan apretada que es complicado saber si esa presión en tu bolsillo es un saqueo o simple 'overbooking' del vagón. Cuando lo confirmas puede que sea demasiado tarde.
4. Madrid, España
El mítico Rastro es uno de los puntos calientes. Muchos carteristas van con largas pinzas, que introducen en los bolsillos de la víctima, extrayendo la cartera de manera muy discreta. La última moda son los museos, donde los incautos son desvalijados mientras contemplan extasiados un Picasso o un Velázquez.
5. Atenas, Grecia
La cuna de la filosofía no se libra de los crímenes de poca monta. Allí la crisis económica aprieta más que en otros países de Europa y el hambre lleva a romper la ley. El único consuelo es que este tipo de cosas pasan desde que el mundo es mundo.
6. Praga, República Checa
Ojito en el célebre Puente de San Carlos, donde los turistas contemplan alineados treinta estatuas de estilo barroco. Es como un pequeño paraíso para chorizos.
7. Costa Blanca (Provincia de Alicante), España
Los rateros de la zona se han hecho famosos por trabajar de tres en tres. Uno escoge a las víctimas más vulnerables, otro la distrae y el tercero se apodera del botín. Este “método tridente” lleva décadas dando buen resultado.
8. Lisboa, Portugal
Si en París el peligro está el metro, en Lisboa el problema son los tranvías saturados de turistas. Llevar la cartera agarrada en hora punta no es ninguna tontería.
9. Tenerife (Islas Canarias), España
El relax absoluto de las Islas Afortunadas solo tiene un punto negro: el alto índice de ladronzuelos que pululan por esta ciudad. Mucho cuidado con los desconocidos sonrientes que se acercan a preguntar trivialidades.
10. Londres, Reino Unido
La ciudad más grande de Europa tampoco puede presumir de un bajo índice de criminalidad. La masiva afluencia de turistas atrae a todo tipo de amigos de lo ajeno.
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