Madrid. (Atlas).- Crisanto López murió hace dos años, dejando una bonita herencia a su mujer y sus tres hijas. Pero apareció un supuesto hijo natural que reclamó su parte. Cuando fueron a exhumar el cadáver para extraer su ADN, el cuerpo de Crisanto había desaparecido.
Todos en el pueblo de Cee situado en la costa da Morte conocen la especial relación que tenía Crisanto con su hijo natural, Manuel, aunque nunca le reconociera como hijo. Tras su muerte quiso realizar una prueba de ADN. Pero cuando acudieron al cementerio a exhumar el cadáver comenzó el misterio.
Dentro sólo quedaban restos de flores secas. Crisanto había desaparecido. El empresario murió hace dos años dejando una millonaria herencia a sus tres hijas reconocidas, pero apareció Manuel y el reparto se complicó.
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